This website provides basic up-to-date information on hepatitis C in languages commonly spoken in Canada.
Hepatitis C is a liver infection that, if left untreated, can lead to serious health problems such as liver failure, liver cancer and early death. When treated, it can be cured. This is why it’s important for you to learn about hepatitis C.
Knowing about hepatitis C transmission, prevention, testing, and treatment can help individuals protect themselves and their loved ones.
This helps make our communities healthier for everyone.
Sigue leyendo para obtener respuestas a preguntas frecuentes sobre la hepatitis C.
La hepatitis C es un virus que ataca al hígado, un órgano que realiza muchas funciones importantes para el cuerpo. El hígado es esencial para tener buena salud.
Si no se trata, con el tiempo la hepatitis C daña el hígado Esto puede provocar graves problemas de salud, como insuficiencia hepática, cáncer de hígado y muerte prematura. Sin embargo, la hepatitis C se puede curar.
La hepatitis C se transmite cuando la sangre de una persona con hepatitis C entra en contacto con la sangre de una persona sin hepatitis C.
Entre inmigrantes y personas recién llegadas, la hepatitis C se transmite comúnmente en sus países de origen debido a medidas de seguridad deficientes en las prácticas de atención médica. Esto incluye:
En Canadá, la hepatitis C se transmite comúnmente al compartir utensilios para el consumo de drogas, especialmente aquellos que sirven para el consumo de drogas inyectables.
La hepatitis C también se puede transmitir:
La hepatitis C ya no se transmite a través de sangre o tejido donados en Canadá. Canadá comenzó en 1992 a realizar pruebas de detección de hepatitis C en sangre y tejido donados.
La hepatitis C nunca se transmite al abrazar, besar o tocar a alguien que tenga el virus.
No existe una vacuna contra la hepatitis C, por lo que es importante hacer lo posible para evitar contraerla.
Hay muchas formas de prevenir la hepatitis C:
La mayoría de las personas que tienen hepatitis C no presentan síntomas durante muchos años, aunque el virus esté activo y dañe el hígado. Puedes tener hepatitis C y no saberlo. No existe una prueba obligatoria de hepatitis C cuando las personas solicitan la residencia permanente en Canadá.
La única forma de saber si tienes hepatitis C es haciéndote la prueba.
Pídele a una persona proveedora de atención médica una prueba de hepatitis C. Es posible que también desees hacerte la prueba de otras infecciones al mismo tiempo, como gonorrea, clamidia, hepatitis B, VIH y sífilis.
¡La hepatitis C se puede curar! En algunas personas, el virus desaparece por sí solo en los primeros seis meses, pero la mayoría de las personas necesitan tratamiento para curar la infección.
El tratamiento de la hepatitis C ha avanzado mucho. Implica hacerse un tratamiento durante ocho o doce semanas y así se logra la cura en casi todas las personas con hepatitis C. El tratamiento suele tener pocos efectos secundarios, si es que los hay.
Si tienes hepatitis C, habla con una persona proveedora de atención médica sobre tus opciones de tratamiento. Cuanto antes comiences el tratamiento, será mejor para tu salud.
Haber tenido hepatitis C no te vuelve inmune. Puedes volver a contraer hepatitis C si vuelves a entrar en contacto con sangre que contenga hepatitis C.
¡La buena noticia es que se puede tratar y curar nuevamente!
Las hepatitis A y B son diferentes de la hepatitis C.
La hepatitis A generalmente se transmite a través del agua o los alimentos contaminados con materia fecal (caca). También se puede transmitir a través del contacto cercano con alguien que tenga hepatitis A. La mayoría de las personas que contraen hepatitis A se recuperan por sí solas. Cuando esto sucede, se vuelven inmunes al virus y no pueden contraer hepatitis A nuevamente.
La hepatitis B puede transmitirse de una persona a otra a través de la sangre, el semen o el flujo vaginal. La hepatitis B también puede transmitirse a un bebé durante el parto. La mayoría de las personas que contraen hepatitis B se recuperan por sí solas; después de esto, no pueden contraer hepatitis B nuevamente. Sin embargo, algunas personas con hepatitis B desarrollan una infección crónica por hepatitis B. Esto es más común en personas que contraen hepatitis B cuando son jóvenes. La hepatitis B crónica puede provocar problemas hepáticos a largo plazo. No existe cura para la hepatitis B.
La vacunación es la mejor manera de prevenir tanto la hepatitis A como la hepatitis B.
Habla con un profesional de atención médica sobre las pruebas de hepatitis C o para recibir tratamiento y atención para la hepatitis C.
Encuentra información en inglés o francés sobre servicios relacionados con la hepatitis C en tu área en https://whereto.catie.ca.